Las redes sociales, como LinkedIn, tuvieron sus inicios en 1929, cuando el escritor húngaro Frigyes Karinthy propuso la teoría de los seis grados de separación; esta plantea que las personas de todo el mundo están conectadas a través de una cadena de máximo seis intermediarios.
Sin embargo, no fue sino hasta el 2003 cuando las páginas web se hicieron populares, entre ellas MySpace y Xing, las cuales tenían como finalidad mantenerse en contacto con amigos, familiares, colegas y compañeros de estudio. Actualmente, este propósito se mantiene, pero han surgido otras redes sociales que dan cabida al marketing digital, portales de noticias, entretenimiento y, por supuesto, al ámbito laboral y profesional en internet.
La teoría de Karinthy ha sido patentada en EEUU y pagada por LinkedIn, de esta manera, conectar a unas personas con otras se ha vuelto más sencillo; se hacen asociaciones según el número de intermediarios que tengan en común unos con otros. A diferencia de Instagram, Facebook o Twitter, LinkedIn tiene un enfoque mucho más profesional. Ahora bien, ¿en qué consiste LinkedIn, cómo funciona realmente y por qué es importante?
LinkedIn es una red social creada en 2002 por Reid Hoffman, actualmente con más de 500 millones de usuarios alrededor del mundo, distribuidos en 200 países. Su misión es conectar a los profesionales de distintas latitudes del planeta para ayudarles a aumentar su productividad y rendimiento.
Contrario a lo que muchas personas podrían pensar, LinkedIn no funciona como un servidor de empleos; tal como lo indican en su misión, dicha red social se basa en la posibilidad de comunicarse de primera mano con los profesionales que sean del interés de cada quien, lo cual, a su vez, es mucho más factible a la hora de buscar un trabajo; no es necesario esperar por respuestas después de enviar el CV, sino que la comunicación es directa, e inclusive se puede contactar a la persona en caso de querer recibir notificaciones en cuanto haya una vacante disponible, es más personalizado.
La manera en la que funciona esta red social es simple; a través de ella se puede tener acceso no solo a personas o empleos, sino también a noticias, actualizaciones e información que son de gran ayuda para destacar en el campo profesional, todo esto de forma gratuita. Para ingresar, es necesario crear un perfil, el cual se recomienda mantener actualizado.
Uno de los tips para obtener mayores visitas al perfil es establecer una foto de perfil, por supuesto de carácter profesional, es decir, se deben evitar fotos de eventos sociales. En el perfil se carga la información personal; formación académica, experiencia laboral, intereses, voluntariados, habilidades, idiomas, ente otros. De la misma manera, se puede cargar el CV. Básicamente, el perfil debe constar tanto de aspectos personales como profesionales.
En LinkedIn, las relaciones se establecen a través de contactos; invitando a las personas a unirse a tu red. Es importante saber escoger las personas con las cuales se quiere contactar, para ello, es recomendable tener un perfil especializado, determinado para un tipo de trabajo en específico con sus respectivos afines, tratar de abarcar lo más importante, así las recomendaciones serán, a su vez, más acertadas.
Los contactos son unos de los aspectos más importantes de un profesional, y aquí radica la importancia de LinkedIn; tener una red de contactos para ampliar las oportunidades en el mundo profesional, posicionarse a través del branding personal y conocer personas que puedan colaborar en tus futuros proyectos o viceversa
. En conclusión, no busques LinkedIn solo cuando necesites empleo, lo recomendable es mantener el perfil actualizado, unirse a los grupos, seguir a empresas y ampliar progresivamente la red de contactos, de esta forma es más probable que se presenten buenas oportunidades laborales y que cada vez obtengas más vistos buenos en tu perfil, ya que las habilidades de cada quien pueden ser validadas por otros, a través de una suerte de likes.
Por: Ana Isabel Ramírez Fernández