Al emprender, la idea inicial de tu negocio no es suficiente, sino que va unido a un duro trabajo para poder desarrollarla y posicionarla en el mercado, y una de las herramientas que garantiza el éxito es sin duda la fluidez del lenguaje que tengas a la hora de transmitir tu mensaje.
El lenguaje está presente en el desarrollo de un emprendimiento, en su etapa inicial a la hora de establecer contacto con proveedores, posibles aliados comerciales o incluso inversionistas, la fluidez y confianza que transmitas te permitirá alcanzar tus objetivos.
Mientras que en la siguiente etapa, donde buscas ofrecer el producto o servicio, el uso de técnicas de escritura persuasiva y la comunicación eficaz es lo que te ayudará a estrechar la relación con tu cliente.
Y es que la forma de comunicar tus ideas a otras personas es la carta de presentación más importante que tienes como emprendedor.
El lenguaje de un líder
La comunicación de las empresas pueden tener un objetivo interno o externo. La primera se basa en la organización de tu equipo de trabajo, es la que conecta cada una de las partes que componen el proceso de producción.
Se puede decir que una comunicación interna eficaz es cuando se logra que todos los miembros estén al tanto de las actividades que se están llevando a cabo en cada una de las áreas, es decir, hacer que tu equipo de trabajo sienta que es parte fundamental del proceso donde su aporte es necesario y sobre todo, valorado. Esto permitirá que cada miembro se sienta identificado con tu marca a quien dedica su tiempo y esfuerzo, y que los éxitos alcanzados lo sienta como propio.
En esta comunicación es fundamental el desempeño de la figura del líder, el lenguaje que implementes con el equipo es el que asegurará la comprensión de cada uno de los mensajes compartidos y la relación del equipo de trabajo, así como también recurrir a técnicas motivadoras para incentivar al logro o el reconocimiento por un trabajo bien hecho con frases sencillas como: ”¡Excelente trabajo!” o “¡Bien hecho!”. Tómate el tiempo de conocerlos, recordar cada uno de sus nombres, e incluso obtendrás puntos extra si los saludas de manera especial el día de su cumpleaños.
La relación con el cliente
Por otra parte tenemos que la comunicación externa se basa en la relación con tu cliente, así también como con aliados, proveedores o inversionistas.
Sin duda estamos en la era del consumidor inteligente, aquel que no se conforma con saber cuáles son tus productos o servicios y cómo estos le pueden favorecer, sino que también su compra dependerá de la afinidad que este sienta con tu marca. Antes de completar cualquier acción de compra primero realizará un búsqueda más exhaustiva acerca de tu empresa como la valoración y los comentarios de consumidores anteriores, así como también parte de tu historia.
El lenguaje juega un papel fundamental al relacionarte con el cliente en las distintas etapas de la comunicación. Durante la retención, se emplea al captar la atención de tu potencial comprador, la manera que transmites los beneficios de tu producto o servicio, al aplicar técnicas de escritura persuasiva como el copywriting y el storytelling que impregnan tus textos de emociones como la nostalgia, alegría, optimismo, con el fin de que cada una de las palabras que uses tenga un propósito específico.
Como último paso tenemos la comunicación directa que el cliente tiene contigo, y aquí es importante dirigirse al cliente con un lenguaje formal, pero a su vez transmitir cercanía y familiaridad; que el cliente se sienta en confianza y bien atendido. Por eso debes expresarte con soltura e incluso con una pizca de humor, y si es a través del chat evita los errores ortográficos o el exceso de muletillas, y porqué no, incluir emojis, gifs o stickers que incluso puedes personalizar para tu marca (cuidando de no excederte).
Es por eso la importancia que tiene para tu emprendimiento el adquirir un lenguaje adecuado, ya que es una herramienta que te permitirá impulsar tu negocio. La formación previa en esta materia así como también la búsqueda continua de nuevos conocimientos, debe formar parte también de tu educación emprendedora, por ello no dudes en consultar y conocer el correcto uso del idioma cuando necesites un apoyo en castellano.
La correcta y fluida transmisión de las ideas tanto con tu equipo de trabajo como con los clientes es uno de los factores que te garantizará el desarrollo y crecimiento de tu emprendimiento, así como también mejora tu imagen personal y profesional.
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